miércoles, 12 de mayo de 2010

Meet the Fockers



Por extrañas vueltas de la vida, Ruby entra por segunda vez en la misma semana en esa casa; soñando esa gloriosa imagen en la cual un tiranosaurio rex se comió a toda la familia, y ella es libre, libre, como el sol cuando amanece, libre. Pero PUM! Cae de vuelta al living que la vió ebria hace pocos días.


Él: Mamá, R; R, mi mamá.

C (Mamá): Sisi... ya me la presentaste el otro día, borracho.

Él: Ah... cierto.

R: ...Me llaman del sótano.

Él: Acá no hay sótano... pero podés salir por la ventana como el domingo...

C: ¿QUÉ VENTANA?

Él: No, ninguna ma.

C: Ah. Son novios ustedes?

Él: No.

C: Ah. Piensan serlo?

R: Ni en pedo.

C: Ah... y viniste a?

R: Y... básicamente el plan consistía en ponerles Ribotril a todos en la cena, comerme la bolsa de gomitas que me compró su hijo y dormir otra vez en su casa sin que lo sepan. Dado que el mismo falló, me parece pertinente aclararle que si por toda ésta movida de presentación piensa que voy a establecer algún vínculo formal con su primogénito, está errada como la puta madre; y que procederé a retirarme clandestinamente por la ventana cuantas veces sea necesario.

C: Ah. Un gusto linda!

No hay comentarios:

Publicar un comentario